EL ORO NEGRO DE AMERICA

Xocolâtl, el oro negro de América

Ya sea en la cubierta de tu paleta favorita, en una taza humeante o en una romántica presentación, el chocolate es perfecto para celebrar cualquier fecha especial; acompáñanos en este artículo a conocer un poco más sobre los orígenes de esta delicia de la naturaleza.

Aunque no se ha definido con precisión el origen exacto del árbol de cacao, cuyo nombre científico es Theobroma cacao, las teorías con mayor aceptación proponen que la diseminación de la planta que permitió crear el chocolate empezó en las tierras tropicales de América del Sur, desde el sureste mexicano hasta la cuenca del río Orinoco o el Amazonas.

Vasijas rescatadas en sitios arqueológicos de Veracruz, Belice y Honduras indican que el consumo de cacao pudo darse desde el período formativo de las culturas prehispánicas de esa región, entre los años 1,900 y 900 a. C., y según el trabajo de muchos historiadores, la bebida fue popularizada en Mesoamérica por la cultura Olmeca.

Dulce tesoro de los dioses
Según la mitología maya, Kukulkán le dio el cacao a esta gente tras la creación de la humanidad, hecha de maíz por la diosa Xmucané, por lo que celebraban un festival anual en abril para honrar al dios del cacao, Ek Chuah, evento que incluía sacrificios de perros y otros animales con signos pintados con chocolate, además de ofrendas de semillas, plumas, incienso e intercambio de regalos.

Las semillas de esta planta eran tan apreciadas por los aztecas que incluso eran usadas como moneda corriente para el comercio de la época, en la región de Mesoamérica en México, ya que era uno de los productos que se utilizaban para pagar el tributo al tlatoani o gobernante.

Gracias a la Conquista de América, el cacao llegó a España y luego a toda Europa y resto del mundo, siendo bien recibida entre la realeza por sus cualidades vigorizantes y estimulante sabor, por lo que a partir de entonces surgió un nuevo nicho que permitió su desarrollo y el establecimiento de una gran industria, que en la actualidad goza de grandes ganancias y un alcance global.

Tuvo un pasado amargo
Al principio, el consumo del cacao era en forma de una especie de cerveza, es decir, una bebida fermentada utilizada en rituales y celebraciones importantes. Tiempo después, los olmecas, mayas y mexicas empezaron a consumir la pasta derivada de los granos de cacao, aderezada con chile. En forma semi líquida y líquida, el chocolate solía ser bebida preferida de la realeza y ya se consideraba un alimento tonificante o energizante, que también mezclaban con harina de maíz, chiles y miel.

Más tarde, con el intercambio cultural y el descubrimiento de nuevas rutas de comercio con países hasta entonces desconocidos, se incorporó a su preparación el azúcar y algunas especias como vainilla y canela, con lo cual se obtuvieron las primeras versiones del chocolate dulce que conocemos ahora.

Una palabra deliciosa
Sobre el origen del nombre de este legendario caramelo, la teoría con mejor sustento propone que la palabra 'chocolate' es una adaptación del vocablo náhuatl 'xocolātl', que se refiere a una bebida espumosa hecha de cacao y cuyo significado literal sería 'agua agria'. Atendiendo a esta hipótesis, se entendería como el resultado de añadir a la palabra de origen náhuatl ātl (agua), la voz xococ (agrio), xocolia (agriar) o xocolli (cosa agría).